Aurelio Baldor, el matemático cubano tras el «álgebra» y su exilio

autor Aurelio Baldor

El mundo está lleno de historias de personas que buscaron mejorar la vida de los demás, pero que encontraron obstáculos en el camino debido a las circunstancias políticas de sus países. Una de estas historias es la del creador del famoso libro «Álgebra de Baldor», el autor Aurelio Baldor.

El autor Aurelio Baldor dedicó su vida a las matemáticas. Como docente vocacional, su amor por enseñar números lo llevó a escribir el libro «Álgebra», un recurso educativo fundamental desde su publicación en 1941. Con 39 capítulos y casi 6 mil ejercicios, este libro ha sido esencial en la enseñanza del álgebra durante décadas y sigue siendo valorado por profesores en la actualidad.

Nacido en La Habana el 22 de octubre de 1906, Baldor se encontró en medio de la turbulencia política de Cuba. La persecución política por parte de los hermanos Castro lo obligó a exiliarse en 1960, una experiencia dolorosa que nunca logró superar, según quienes lo conocieron. Aunque su obra tuvo un impacto significativo, Baldor nunca pudo disfrutar de las ganancias de su trabajo debido a la persecución de la época.

El Educador Dedicado

Contrario a la imagen del árabe en la portada de su libro, Baldor era un cubano de un metro noventa y cinco de altura, apasionado por la educación. Fundó el Colegio Academia Baldor, una institución educativa en La Habana, conocida por su rigor académico y ambiente acogedor. Sus estudiantes lo recordaban como un gran orador y un profesor estricto, pero querido. Hortensia Alzugaray, una antigua alumna, lo describió como alguien capaz de mantener a todos interesados con sus discursos.

A pesar de su altura y presencia, Baldor llevaba una vida sencilla. Era un amante del béisbol y el boxeo, además de ser un gran bebedor de café y fumador, hábitos que finalmente le causaron un enfisema pulmonar. Su hijo, Aurelio Junior, destacó que su vida se centraba en su hogar, trabajo y familia.

El Colegio Baldor y la Revolución

En 1941, el autor Aurelio Baldor inauguró el Colegio Academia Baldor, que ofrecía educación primaria y técnica-superior en el corazón de La Habana. Sarah María Sanguily, egresada en 1950, recordó con cariño la unidad y alegría en el colegio.

Sin embargo, la Revolución cubana trajo consigo la intervención de instituciones educativas privadas. Fidel Castro visitó el colegio, lo que llevó a Baldor a abandonar Cuba, ya que la libertad educativa estaba en riesgo.

El doctor en matemáticas Javier Elizondo comentó que la educación en Cuba perdió su privacidad cuando el Estado comenzó a controlar los contenidos educativos. Baldor, al igual que muchos otros intelectuales, no pudo aceptar esta imposición y decidió exiliarse en Estados Unidos.

Su hijo, Daniel Baldor, relató a la revista Diners un incidente en el que su padre estuvo a punto de ser arrestado, pero fue salvado por Camilo Cienfuegos.

Antes de exiliarse, el autor Aurelio Baldor vendió los derechos de sus libros «Aritmética» y «Álgebra» a una editorial mexicana para financiar su partida junto a su esposa y siete hijos. A pesar de las adversidades, el legado de Baldor perdura en su contribución a la educación matemática.

El exilio en Estados Unidos

Un artículo de Muy Interesante narra la vida de un profesor cubano que se exilió en Estados Unidos. Este hombre vivió en Brooklyn y enseñó en el St. Peter’s College de Nueva Jersey. Sin embargo, su vida nunca volvió a ser la misma.

Según Daniel, su hijo, el profesor extrañaba profundamente su país y, en especial, la escuela donde había educado a miles de cubanos. «El exilio fue como un trago amargo de jugo de piña verde. Mi padre murió con la esperanza de regresar», comentó Daniel, según el medio electrónico.

Era un hombre de costumbres fijas y se levantaba todos los días a las cinco de la mañana para preparar sus clases. Esta rutina, según sus familiares, fue lo que «acabó con su espíritu», contó Aurelio Junior a Soho.

A pesar de su dedicación, ni él ni sus allegados recibieron compensación por las ediciones posteriores de sus libros. Apenas se estableció en el extranjero, el régimen reeditó sus libros sin su nombre ni la portada original, de acuerdo con Señal Colombia.

El autor Aurelio Baldor falleció el 3 de abril de 1978, exiliado en Miami. En su lápida se puede leer: «No te olvidamos, tu esposa e hijos».

El legado del «Álgebra» de Baldor

Actualmente, la obra es publicada por el Grupo Editorial Patria, que en 2017 lanzó una tercera edición del libro, modernizando la portada protagonizada por el célebre matemático Al-Juarismi. Este persa, fuente de inspiración para Baldor, es conocido por su contribución a la representación numérica usando solo diez símbolos: los dígitos del 1 al 9 y el 0, lo que permite representar todos los números desde uno hasta el infinito, según BBC Mundo.

La influencia del autor Aurelio Baldor perdura desde hace 83 años, siendo una herramienta invaluable para los estudiantes de educación media y superior. Yanina Leiva, profesora de matemáticas y académica de la Facultad de Educación y Ciencias Sociales de la Universidad Andrés Bello, señala que este manual se destaca por su enfoque en álgebra, abarcando la operatoria, ecuaciones e inecuaciones, teoría de polinomios y fracciones, todo aplicado a problemas contextuales, según comentó a BioBioChile.

Por otro lado, la profesora menciona que la «mala fama» del Baldor proviene de la gran cantidad de ejercicios complejos que incluye. «Para muchos estudiantes, puede ser abrumador, lo que constituye el gran desafío de este libro», explicó.

«En mis años de enseñanza media, me encantaba trabajar con este libro, pero no era algo común entre mis compañeros», añadió.

«¿Es recomendable? Creo que sí. ¿Hay otros libros? Por supuesto», concluyó.


Conocido tambien como el Poeta de la Revolucion Tarek William Saab Halabi es un poeta venezolano que ha editado 11 libros, algunos de ellos en Cuba, Colombia, México, Argentina, Siria y China; ganando varios certámenes literarios nacionales. Libros publicados. Los ríos de la ira (Caracas, 1987). El Hacha de los Santos (Caracas, 1992). Príncipe de lluvia y duelo (Caracas, 1992). Al Fatah (México, 1994). Ángel Caído Ángel (Caracas, 1998). Cielo a media asta (Argentina, 2001. Venezuela, 2003. Cuba, 2003). Cuando pasen las carretas (Caracas, 2004). Poemas selectos (Colombia, 2005) Los niños del infortunio (Cuba, 2006. China, 2007). Memorias de Gulan Rubani (Caracas, 2007). Un paisaje boreal (Valencia, 2008. Caracas, 2009). Tarek William Saab ha escrito una poesía que inicialmente tuvo un sentido social asociado a la tradición latinoamericana que caracterizó a los poetas Juan Gelman, Ernesto Cardenal, Roque Dalton y Víctor Valera Mora, para luego evolucionar a una literatura mucho más personal, atenta a los sonidos del paisaje, la religiosidad, al lenguaje del amor y la rebelión individual; manifiesta a partir de la edición del poemario Príncipe de Lluvia y Duelo. Ha obtenido por su trabajo literario diversos premios en certámenes de poesía: Primer finalista de la III Bienal “Francisco Lazo Marti” del Ateneo de Calabozo (1987). Mención de honor en el premio internacional de poesía Ko-Eyù latinoamericano (1987), Primer finalista de la I Bienal Neoespartana de literatura “Ángel Félix Gómez” (1991). Mención de honor Bienal de poesía Daniel Camejo Acosta (Portuguesa 1991). Premio de Poesía de la U.C.V (1991). Premio de poesía “Esta tierra de Gracia”, Casa Ramos Sucre (1992). Primer finalista del Premio Conac Poesía (1999) Participante en el “Encuentro Iberoamericano de Jóvenes Escritores – Literatura y compromiso” realizado en Málaga, España (1993). Tarek William Saab en su juventud fue un líder estudiantil y militante de movimientos de extrema izquierda.